Elegir unas manzanas golden maduras y dulces. Pelarlas, retirarles el corazón y cortarlas en 4-8 gajos dependiendo su tamaño.
Dejarlas en remojo en agua con limón cortado en trozos para evitar que ennegrezcan.
Después se escurren y se pesan para calcular la cantidad de azúcar que se empleará, teniendo en cuenta que se utilizará el mismo peso que de manzanas.
Preparar un almíbar a punto de hebra fino con el azúcar y la mitad de agua (si se emplea 1 kilo de azúcar se pondrá ½ litro de agua). Para saber cuando el almíbar está listo, se mojan las yemas de los dedos con agua y se pone en ellas una gota de almíbar, unir los dedos y volverlos a separar, si el almíbar se estira en hilos delgados y se rompen fácilmente, ya está el punto de hebra fino. El tiempo de cocción del almíbar para conseguir este punto será de unos 5 minutos.
Obtenido el punto del almíbar se añaden las manzanas y se dejan cocer 6 minutos. Entonces retirar las manzanas del fuego y dejar enfriar.
Una vez frías por completo se colocan dentro de tarros o frascos, se cubren con el almíbar llenando hasta el borde y se cierran. Guardar en sitio fresco y seco.