Montar las claras de huevo a punto de nieve firme con una pizca de sal y la fructosa. Si se desea obtener el merengue con sabor a café, se añade además una cucharadita de café descafeinado soluble.
Repartir las claras en 4 moldes y darles un golpe de gratinador en el horno para que se dore la superficie de las claras ligeramente sin quemarse.
Dejar atemperar y servir espolvoreados con un poco de canela en polvo.