Cómo hacer magret de pato con manzanas y ciruelas paso a paso
Con un cuchillo bien afilado, traza cortes ligeros sobre la grasa del pato haciendo dibujos de rombos o cuadros (esto lo hacemos para que no se encoja demasiado).
Salpimenta bien las pechugas de pato y colócalas en una sartén a fuego medio con la grasa hacia abajo y sin nada de aceite, ya que el pato soltará gran cantidad de grasa. Deja que la grasa se dore y se ponga crujiente durante unos minutos. Dale la vuelta y deja que se haga durante otros 3 minutos.
Saca los magrets y colócalos sobre un plato. Se enfriarán un poco para que podamos filetearlos y soltarán un juguito que guardaremos como “oro en paño”, porque lo utilizaremos en la salsa de las manzanas.
Pela las manzanas y córtalas en láminas, como si fueran patatas para tortilla. En una sartén o wok pon a calentar dos o tres cucharadas de la grasa que soltó el pato y echa las manzanas junto con las ciruelas y la fructosa. Saltéalo a fuego fuerte removiéndolo constantemente. Cuando empiece a dorarse la mezcla, añade el jugo que ha soltado el pato durante su reposo y déjalo cociendo durante un minuto, más o menos. Apaga el fuego.
Enciende el horno a 220º.
Filetea el pato ahora, que ya se habrá enfriado un poco. En una fuente para horno, haz una cama para el pato con la salsa de manzanas y dispón encima de ésta el pato fileteado. Introdúcelo en el horno tres minutos para que se caliente y ya lo tienes listo.
Si no tienes horno, puedes utilizar el microondas, pero sólo durante un minuto o la carne se te cocerá. Ten en cuenta que esta última operación (horno o microondas) es simplemente para calentar.